Muchas personas sienten que les falta confianza en sí mismos. Desearían sentirse más seguras, ser mas resolutivas a la hora de tomar decisiones, o tener mayor firmeza a la hora de afrontar retos. Pero la seguridad sólo se alcanza al encarnar lo que produce miedo.
Las personas tímidas o temerosas a menudo tienen la tentación de apartarse, de no afrontar las situaciones que les atemorizan. Para estas personas esas situaciones suponen un calvario y la solución más fácil es no afrontarlas.
Cada vez que esto sucede el miedo gana una batalla. Y es así como el temor crece y crece y se hace más abrumador. En las próximas ocasiones no solo será mas grande el miedo, sino que además habrá disminuido la confianza que la persona tenía en si mismo.
Todos actuamos, en alguno, o en muchos aspectos, de manera parecida. ¿Cuántas cosas dejamos de hacer porque algo nos atemoriza? ¿Cuántas veces damos un paso atrás porque tenemos miedo a fallar, al ridículo o a no dar la talla?. Cada paso nuevo encierra el peligro de fracasar, por eso muchas veces nos limitamos a lo que consideramos seguro, conocido, cómodo, porque por lo menos en ese lugar sabemos a que atenernos.
Pero la seguridad en uno mismo se gana precisamente yendo hacia lugares más inseguros. Es decir, avanzando hacia lo que parece incierto, novedoso, lo que despierta inquietud. Sólo así se puede construir la afirmación interna de que uno puede enfrentarse a las situaciones, aunque unas veces salga bien parado y otras no tanto. Intentarlo ya implica una victoria. Lo peor es quedarse en casa pensando "no soy capaz".
El mundo es de los valientes !
ResponderEliminarBienvenida Di.Bienvenida a la casa de lavanda. Estamos encantados de tenerte aquí. :)
EliminarSoy tan miedosa! Pero no me pierdo una oportunidad si se presenta ni dejo que el miedo me gane. En todo caso no me tiraría en paracaídas jaja
ResponderEliminarCariños!