domingo, 23 de marzo de 2014

LA ENERGIA DE LOS COLORES



ESTIMULANTES, RELAJANTES, ALEGRES, DEPRESIVOS...LOS COLORES INFLUYEN EN EL ESTADO FÍSICO ANÍMICO Y ESPIRITUAL MÁS DE LO QUE IMAGINAMOS







El color es luz, y la luz es color. En el mundo que nos rodea no hay en sentido estricto colores reales, sino ondas de longitud diversa que son reflejadas por todo aquello que toca la luz y que percibimos a través de los ojos. Los colores responden a frecuencias medibles y son, por tanto, una forma específica de energía. El espectro de colores que conocemos, es la parte visible de la energía electromagnética que nos rodea , y que incluye también los rayos X, las microondas o las ondas de radio. Cada color que podemos percibir a través de la vista oscila en diferentes longitudes de onda y emite unas vibraciones que lo distinguen del resto. La cromoterapia las emplea para ganar salud y equilibrio en casos concretos. 

ROJO ESTIMULANTE:
El rojo es el color que tiene la longitud de onda más larga y se considera que ejerce una acción estimulante sobre el corazón y el sistema circulatorio, impulsando las descargas de adrenalina en el torrente sanguíneo. Es el color de la sangre y el que encarna la pasión, la sexualidad, la actividad, la prosperidad y la ambición. Puede resultar útil vestir alguna prenda roja y rodearse de objetos o flores de este color, en casa y en el trabajo, especialmente cuando la timidez y el inmovilismo atenazan y no dejan avanzar. Cuidado¡¡ debido a su potencia, en exceso puede causar irritabilidad.

LA VITALIDAD DEL NARANJA:
También es un color cálido, pero menos intenso y nervioso que el rojo y se considera el color idóneo para salir de la apatía. Símbolo de la vitalidad, el naranja activa el sistema inmunitario, expande los pulmones y actua sobre el bazo y el páncreas para ayudar a la asimilación y a la circulación. Se utiliza en casos de asma, bronquitis, problemas renales, reunamtismos, dolores musculares, resfriados, resfriados, agotamiento mental y depresión. Vestir prendas naranjas, teñirse el pelo de color cobrizo o pintar de naranja el vestíbulo, la cocina o el salón pueden ayudar a recuperar la alegría y a afrontar la vida con mayor confianza.

AMARILLO LUMINOSO: 
Es el color del sol y del oro. Su carácter luminoso se asocia a la inteligencia, y la sabiduría. En el ámbito terapéutico, sus longitudes de onda se usan para estimular el cerebro y ayudar a despejar la mente. El amarillo parece reforzar el sistema nervioso e incide en los procesos digestivos. Rodearse de este color puede ser muy efectivo si se padece confusión mental y pensamientos obsesivos. Ayuda a desarrollar la mente lógica y la capacidad de razonamiento

EL EQUILIBRIO DEL VERDE:
Es el color del mundo vegetal y representa la regeneración, el crecimiento y la esperanza. Su capacidad de infundir bienestar, tranquilidad y una agradable sensación de frescor lo convierten en un gran aliado para personas que trabajan mucho tiempo con ordenadores o bajo luz artificial. Aunque en su aspecto negativo el verde representa el egoísmo, la envidia o la pereza y en tonalidades oscuras puede incluso deprimir, en sus tonos más alegres es un excelente remedio para aliviar el estrés, el cansancio, ayuda en los problemas de hígado y dolores de cabeza y devuelve la estabilidad en los vaivenes anímicos. Poner pinceladas de verde en el hogar a través de plantas nos conecta con la naturaleza y da paz al espíritu, mientras que jugar con tonalidades claras y suaves de verde en el dormitorio aporta un sueño reparados y reconforta. 

LA PAZ ES AZUL
Situado en el extremo frío del espectro, el azul es el color del cielo, la inspiración, la paz y la tranquilidad y uno de los tonos preferidos por la mayoría de personas. Actúa como calmante y refrescante, al igual que el verde, por lo que es un color excelente para la meditación y para aplicar en lugares de descanso y curación. Las habitaciones azules y la iluminación azulada crean un entorno relajante en el que se siente la sensación de disponer de mucho más tiempo para dormir. También es un color interesante para el cuarto de baño, el estudio (si se combina con colores cálidos)  y la habitación de un bebe. Los tonos oscuros de azul o un exceso de este color se desaconsejan en personas con depresión. Para darle mayor vivacidad y contraste se aconseja combinarlo con su color complementario: el naranja. 

AÑIL PARA LA REFLEXIÓN:
El añil o índigo aporta las condiciones necesarias para la autorreflexión y la contemplación. Es un color que se asocia con la obtención de una visión más profunda de uno mismo y con la capacidad de para oír la voz interior. Se considera que el color añil, frío y astringente, tiene la virtud de ser un poderoso analgésico. Se utiliza para aliviar los problemas del pecho: bronquitis, asma y para el tratamiento de lumbago, ciática, migraña, eccemas e inflamaciones. Contribuye a bajar la presión sanguínea elevada y se cree que es particularmente efectivo para una tiroides hiperactiva. Según la cromoterapia, la exposición al color añil también ayuda en dolencias renales y contribuye a disolver quistes.

VIOLETA ESPIRITUAL:
El violeta, una mezcla de rojo y azul tiene la longitud de onda más corta, y el máximo de energía de todos los colores del espectro. Se relaciona con las aspiraciones espirituales más elevadas del hombre, con la creatividad y con la conciencia. Empleado con fines terapeúticos, el violeta se considera útil para combatir infecciones, ya que estimula la producción de leucocitos y resulta favorable para aliviar los dolores de cabeza, los trastornos nerviosos, y las enfermedades del cuero cabelludo y para atenuar las palpitaciones del corazón y aliviar la angustia vital. Las personas nerviosas pueden incluir este color en los complementos de su entorno o en alguna pared del dormitorio, estudio, salón o comedor en tonos muy suaves

BLANCO Y NEGRO:
Dos de los colores que conocemos, son especialmente particulares: el blanco es la síntesis de todos, y el negro la ausencia de color. El blanco evoca la luz, la pureza, la santidad y la inocencia. El negro se asocia con la introspección, la soledad y la tierra. Pero el negro también alude al comienzo, al igual que el blanco sugiere la ausencia de vida en las altas cumbres heladas y desiertas. Ambos colores representan el principio y el fin. Todo y nada, vida y muerte, luz y tinieblas, yin y yang. 





1 comentario:

  1. Hoy no hay color...es uno de esos días grises donde todo es opaco, donde la mirada barre sueños y desdibuja el arcoíris hasta reducirlo al blanco.
    Hoy no hay color...sólo tristeza en un lienzo vacío de retazos.

    ResponderEliminar

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...